Basado en el libro de José Hernández,
cómo
fue la vida y la obra de uno de los grandes caudillos del siglo XIX
Por Eugenio Németh
Ángel Vicente Peñaloza nació en los llanos
de la Rioja en 1796. Fue criado por un tío abuelo sacerdote que le dio el apodo
del “chacho”, siguió la carrera de las armas y fue principal colaborador de
Facundo Quiroga “El tigre de los llanos” en sus batallas más importantes. El
Chacho fue famoso por su coraje en el combate cuerpo a cuerpo.
Después de la muerte de Quiroga en Barranca
Yaco le apodaron el “Caudillo de los llanos” por su bravura y temple. Se sumó a
las filas unitarias para luchar en contra de Rosas. Luego apoyó la definitiva
campaña de Urquiza, quien debido a sus méritos lo nombró General de la Nación.
La batalla de Caseros en la que Urquiza
derrota definitivamente a Juan Manuel de Rosas fue cuestionada por el Chacho,
en relación con la política porteña (esperó en vano la reacción de Urquiza) y
después de la batalla de Pavón impuso con vigor la pacificación del interior,
que Mitre condujo con mano firme. El Chacho se opuso al gobierno central, pero
ya en creciente soledad. Fue acorralado y finalmente muerto por las fuerzas
nacionales en 1863.
Peñaloza se hallaba en Olta, descansando de
las sucesivas batidas sostenidas por los partidarios mitristas. Fue apresado en
su rancho y se entregó sin resistencia, sin embargo una vez desarmado fue
brutalmente asesinado. Inmediatamente después se expuso su cabeza degollada en
una pica en la plaza de Olta durante tres días.
Las oscuras circunstancias de la muerte de
éste caudillo de más de 60 años, contribuyeron a convertirlo en un mito
popular. Destacado como militar por su arrojo y su efectividad en el manejo de
la montonera, no había sido un estratega de ejército regular, sino más bien un
instintivo jefe de caballería.
Hernández publicó la biografía del
montonero riojano cuando se enteró de su muerte. Indignado por la noticia, hizo
su apología y lo definió como un héroe en un enérgico panfleto de denuncia.
José Hernández, autor de El Martín Fierro y
considerado el más grande poeta popular de la Argentina, fue también un
destacado periodista, ensayista, legislador y político, además de militar.
Colaboró en distintos diarios como El
Nacional Argentino, la Reforma Pacífica, la Patria de Montevideo, la Libertad
de Buenos Aires y el Eco de Corrientes, entre otros.
En 1863, exiliado en el Paraná, editó su
propio diario, El Argentino. Años más tarde en Buenos Aires sacó a la luz el
segundo periódico, El Río de la Plata. En 1872 dio a conocer los primeros
versos del gaucho Martín Fierro, lo que se convirtió en el primer best seller
nacional. Semejante éxito lo indujo en 1879 a retomar la saga con “La vuelta de
Martín Fierro”, terminando así de conformar el primer poema épico de la patria.
María Celina Ortale es Profesora y
licenciada en Letras de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional
de la Plata. Y es autora de la tesina que aborda la génesis de rasgos
biográficos del general Angel V.
Peñaloza y su interacción polémica en el contexto literario y político del
siglo XIX, aprobado por la universidad de la Plata en mayo de 2002. Tuvo a su
cargo la reedición en tres tomos de la obra parlamentaria de José Hernández,
publicada por la Cámara de Diputados bonaerense en 2003. Colaboró e hizo un
estudio filológico, edición y notas de “La vida del Chacho Peñaloza” de José
Hernández. Según Ortale, Peñaloza condensa las tensiones de la historia
argentina durante el siglo de su conformación cono Nación.